Nunca le hablé de ti a nadie.

Nunca le hablé de ti a nadie, guardando tu recuerdo como mi mejor secreto.

Tus caricias bajo la mesa…
las quedadas a escondidas.
Tu culo en pompa y tus pies de puntillas.

¡Qué locura cómo besas!…
contrastes que mi piel eriza.
No verte se convertía en pesadilla.

Nunca le hablé de ti a nadie, por vergüenza de sentirme en tu vida un hombre ajeno.

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